La vida es un teatro
mi propio personaje protagónico
la historia se complica
las luces se apagan
no recuerdo el texto
me han cambiado la historia
el personaje ha cambiado
es momento de improvisar...
Ya le he cambiado el nombre
le he cambiado los puntos
le he cambiado el a dónde va
ahora nada parece claro,
pero así son los personajes
a veces nos cuesta trabajo entenderlos,
pero sólo los dejamos ser libres vivir,
usar nuestro cuerpo... ya hará algo bueno,
ya arrancará sus propios aplausos
Cierro los ojos... y no despierto,
sigo en ESCENA pero no hay aplausos,
todavía no se cierra el telón... sigo ACTUANDO
Aún no hay aplausos...
de Jessica Zermeño, el El miércoles, 27 de enero de 2010 a las 23:23
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